Un legado de belleza, pasión y excelencia
En Perris, la belleza no es sólo un negocio: es un patrimonio preciado, una forma de vida y una tradición familiar profundamente arraigada que ha florecido a lo largo de generaciones.
Nuestro viaje comenzó con Michele Perris, una visionaria cuyo amor por el arte de la perfumería y el cuidado de la piel sentó las bases de lo que se convertiría en un legado atemporal. Inspirado por el encanto de la elegancia y el poder transformador de las fragancias, Michele se propuso crear algo más que productos: aspiraba a construir un mundo en el que convergieran la artesanía, la emoción y la autenticidad.
Lo que empezó como una pasión personal se convirtió rápidamente en una empresa familiar, y el nombre Perris se convirtió en sinónimo de sofisticación e innovación en el mundo de la belleza. A lo largo de más de cincuenta años, la familia Perris ha desempeñado un papel vital en la configuración de la industria de la belleza moderna, colaborando con diseñadores emblemáticos, asociándose con prestigiosas casas mundiales y ampliando constantemente los límites de la excelencia.
En la actualidad, Perris es un referente de belleza refinada e integridad artesanal. Nuestras creaciones abarcan una cuidada selección de fragancias y productos para el cuidado de la piel, cada uno de ellos elaborado con una meticulosa atención al detalle y una inquebrantable dedicación a la calidad.

Nuestras fragancias no son meros olores: son historias embotelladas en vidrio, compuestas por maestros perfumistas e inspiradas en culturas, recuerdos y el mundo natural. Al igual que los aromas evocan emociones, nuestros tratamientos captan el espíritu del bienestar y el cuidado personal. Cada fórmula es el resultado de una investigación y una innovación avanzadas, que combinan tecnología punta con ingredientes 100% limpios y seguros para la piel. Diseñados para ofrecer un alto rendimiento respetando el equilibrio natural de la piel, nuestros tratamientos ofrecen resultados visibles y una experiencia sensorial refinada.
Cada creación se guía por tres valores fundamentales que definen el espíritu de Perris:
Conocimientos, perfeccionados a lo largo de décadas de experiencia.
Pasión, heredada de nuestro fundador y alimentada por cada generación.
Y la excelencia, nuestra norma inquebrantable en todo lo que hacemos.
De cara al futuro, seguimos comprometidos con el respeto a nuestras raíces y la innovación. A través de cada botella, cada textura y cada experiencia, Perris sigue celebrando el poder intemporal de la belleza: encantar, elevar e inspirar.
